El restaurante está ubicado justo frente al mar, por lo que es una vista muy agradable. Los camareros son muy amables y hablan inglés con fluidez. En un lugar encantador, directamente en el paseo junto al agua, este restaurante tiene las opciones de desayuno más deliciosas, que incluyen ensalada de fruta fresca, cruasanes crujientes y un buen café.